Una situación aparentemente adversa puede convertirse en algo muy positivo.
En cada experiencia podemos buscar el punto de vista más útil, para convertirla en algo que nos favorezca, con positivismo y perseverancia podremos reencuadrar los problemas para convertirlos en oportunidades.
Aquí os dejo un cuento popular que lo refleja muy bien:
El burro que cayó en un pozo
Un día, el burro de un campesino se cayó en un pozo.
El animal lloró fuertemente por horas, mientras el campesino trataba de buscar algo que hacer.
Finalmente, el campesino decidió que el burro ya estaba viejo y el pozo ya estaba seco y necesitaba ser tapado de todas formas; que realmente no valía la pena sacar al burro del pozo.
Invitó a todos sus vecinos para que vinieran a ayudarle. Cada uno agarró una pala y empezaron a tirarle tierra al pozo.
El burro se dio cuenta de lo que estaba pasando y lloró horriblemente. Luego, para sorpresa de todos, se aquietó después de unas cuantas paladas de tierra.
El campesino finalmente miró al fondo del pozo y se sorprendió de lo que vio… con cada palada de tierra, el burro estaba haciendo algo increíble: Se sacudía la tierra y daba un paso encima de la tierra.
Muy pronto todo el mundo vio sorprendido cómo el burro llegó hasta la boca del pozo, pasó por encima del borde y salió trotando…
La vida va a echarnos tierra, todo tipo de tierra. El truco para salirse del pozo es sacudirse la tierra y dar un paso hacia arriba. Positivismo y perseverancia. Cada uno de nuestros problemas pueden ser un escalón hacia arriba. Nosotros podemos salir de difíciles situaciones.
María Fernández de la Riva
Psicóloga clínica M-29020
Experta en Mindfulness.
Tfno. 639 40 74 93
Qué bonito relato. Gracias por compartir. Saludos desde UK.
Muchas gracias Ana